Accesorios para bloqueo de tejido y labores

El bloqueo es especialmente útil en prendas que necesitan medidas exactas o dibujo definido. Chales calados, jerséis con canesú, cárdigans, tops de verano y mantas de bloques se benefician de los accesorios para bloqueo de tejido y labores, porque el estirado controlado abre el punto y corrige pequeñas variaciones de tensión. También ayuda a que las costuras asienten mejor y que los bordes no se enrollen hacia dentro.

En calcetines, manoplas y gorros, los bloqueadores para calcetines, T-pins y cables de bloqueo dan volumen donde hace falta sin deformar el tejido. En proyectos modulares, como granny squares o piezas de patchwork tejido, un tablero bloqueador para granny squares iguala todos los cuadrados antes de unirlos, evitando diferencias de tamaño que se notan al montar la pieza final.

Las alfombrillas para bloqueo de prendas son paneles de espuma densa que se ensamblan como un puzle para crear la superficie que necesites. Están pensadas para bloquear prendas de distintos tamaños, desde chales grandes hasta jerséis, y admiten pinchar T-pins o bloqueadores de punto con profundidad suficiente sin dañar la mesa. Son versátiles para quien alterna proyectos y necesita adaptar cada vez la zona de trabajo.

Un tablero bloqueador para granny squares suele tener guías o perforaciones fijas para colocar varillas y bloquear siempre los cuadrados con las mismas medidas. Está más orientado a trabajos repetitivos de piezas pequeñas, donde interesa que todos los módulos salgan idénticos. Muchas tejedoras combinan ambos: tablero para módulos y alfombrillas para el bloqueo final de mantas, prendas grandes o proyectos con formas irregulares.

Secar las prendas en plano sobre una toalla ayuda, pero no sustituye del todo al trabajo que hacen los accesorios de bloqueo para punto y ganchillo. Una toalla absorbe humedad, pero no ofrece referencias de medida ni permite fijar los bordes con precisión. Sin T-pins, cables y bloqueadores de punto, es fácil que las piezas se encojan ligeramente, queden asimétricas o con bordes ondulados.

Con un kit de bloqueo para punto y ganchillo puedes respetar el patronaje: medir ancho y largo reales, abrir calados sin deformar la trama y asegurarte de que dos mangas o dos delanteros coinciden al milímetro antes de coser. No es obligatorio para tejer, pero la diferencia de acabado entre una prenda bloqueada y otra que solo se ha secado en plano se nota, sobre todo en encaje, colorwork y prendas de vestir.

Para usar alfombrillas para bloqueo de prendas, colócalas sobre una superficie estable y limpia, encajando las piezas como un puzle hasta lograr el tamaño que necesitas. Extiende la prenda humedecida o lavada, alísala con las manos y empieza a fijar los bordes con T-pins y bloqueadores de punto, clavando siempre en la base de la puntada y no en el hilo suelto. Reparte la tensión de forma homogénea, sin estirar en exceso ninguna zona.

Es importante usar T-pins y agujas de bloqueo inoxidables para evitar manchas, sobre todo en fibras claras o naturales. Comprueba que las puntas atraviesan bien la espuma sin sobresalir por debajo y deja secar la prenda hasta que esté completamente seca al tacto. Si tienes mascotas o niños en casa, bloquea en una habitación cerrada para evitar accidentes o que los pines se muevan durante el proceso.

Si no bloqueas con mucha frecuencia o cuentas con poco espacio, puedes empezar con un kit de bloqueo para punto y ganchillo básico: un juego de T-pins inoxidables, unos cuantos bloqueadores de punto de varias agujas y un par de alfombrillas de tamaño medio. Con eso podrás bloquear chales, cuellos, piezas de bebé y proyectos de tamaño moderado sin llenar la casa de material.

Para labores pequeñas o modulares, un tablero bloqueador para granny squares compacto y fácil de guardar resulta práctico, porque permite trabajar por tandas sin ocupar toda la mesa. A medida que bloquees más proyectos, puedes ampliar el set con más alfombrillas para bloquear labores, cables de bloqueo para chales o bloqueadores para calcetines, según el tipo de prendas que tejas con más frecuencia.