Marca con trazos que se lean a simple vista pero sin invadir la pieza. Un marcador de tela deja líneas nítidas para cortes y piquetes; la tiza de sastre aporta un apoyo seco en superficies donde prefieres menos trazo; los rotulador de tela al agua y rotulador de tela al aire ofrecen señales temporales que desaparecen con humedad o con el tiempo. Antes de trabajar sobre la prenda, prueba siempre en un retal del mismo tejido y revisa la visibilidad bajo la iluminación real en la que vas a coser o montar.
Hazte un pequeño protocolo: trazar → comprobar → ejecutar → retirar marca al terminar el tramo. Evita marcar todo el proyecto de una vez si vas a manipular mucho; las referencias se desplazan y confunden. En zonas curvas, marca puntos clave y une mentalmente; en rectas largas, puntos separados con una guía ligera bastan. Combinando marcador de tela, tiza de sastre, rotulador de tela al agua y rotulador de tela al aire tendrás señales claras cuando las necesitas y una superficie limpia al rematar.