Set de Agujas de Doble Punta DROPS Pro Romance

El set de agujas de doble punta DROPS Pro Romance incluye 30 agujas en total: 6 juegos de 5 agujas, cada juego en un grosor distinto. Las medidas del set son 2,5 / 3,0 / 3,5 / 4,0 / 4,5 / 5,0 mm, y cada aguja mide 20 cm. Es un rango muy típico para circular pequeño y accesorios donde necesitas ajustar muestra con precisión.

En el uso real, tener 5 agujas por tamaño permite trabajar con el método clásico sin “inventar” una aguja extra. En varias tiendas el set se presenta con estuche transparente para separar grosores, algo que ayuda a no mezclar medidas cuando alternas proyectos o cuando retomas una labor tras varios días.

Si te encuentras comprando agujas sueltas cada vez que un patrón cambia de grosor, comprar el set de agujas de doble punta DROPS Pro Romance suele salir a cuenta por una razón simple: te quita fricción. No es “tener más”, es tener el rango habitual listo para empezar y poder ajustar la densidad sin parar el proyecto. En circular pequeño, 0,5 mm arriba o abajo puede ser la diferencia entre acertar la muestra o rehacer.

También compensa si haces varios tipos de accesorios: hoy calcetines, mañana guantes, pasado un gorro. En esos saltos es cuando más se nota el valor del set, porque cambias de hilo y de patrón sin depender de una única medida. Y al ser un kit cerrado, reduces el riesgo de tener medidas duplicadas y otras que te faltan justo cuando las necesitas.

El set de agujas de doble punta DROPS Pro Romance se usa mucho para calcetines porque el diámetro pequeño es su terreno natural, pero no se limita a eso. Cualquier pieza tubular o sección estrecha donde una circular se te haga incómoda encaja bien: puños, mangas estrechas, guantes, mitones o incluso la parte final de un gorro cuando estás cerrando la corona y el número de puntos baja.

La ventaja es la estabilidad: al repartir puntos entre varias agujas puedes mover el “corte” del tejido donde te convenga y acceder mejor a zonas con aumentos o menguados. Si te gusta tejer sin costuras y con control, la doble punta te permite adaptar la herramienta al proyecto, no al revés.

Con el set de agujas de doble punta DROPS Pro Romance trabajas con un reparto de puntos “físico” entre agujas, lo que a muchas tejedoras les resulta más directo en diámetros pequeños: no hay cable que gestionar, ni tirones al mover el bucle, y puedes recolocar el reparto de puntos según la zona del patrón. En secciones como talones o punteras, esa libertad para mover el punto de unión suele ser muy cómoda.

Magic loop puede ser igual de válido, pero depende mucho de tu relación con el cable y de la tensión. Si tiendes a apretar o a crear escalones, a veces te es más fácil corregirlo con doble punta porque el tejido queda más homogéneo al repartirlo. La elección no es “mejor o peor”: es qué método te deja avanzar con menos interrupciones.

La madera de abedul pulida del set suele ir muy bien cuando trabajas con hilos que en metal “se escapan” demasiado rápido, porque da un punto extra de control sin frenar en exceso. Eso ayuda especialmente en grosores finos, donde una puntada que se desliza de más puede deformar la tensión. Además, la madera suele resultar agradable en sesiones largas por el tacto cálido.

Dicho esto, si te gusta un deslizamiento extremadamente rápido o sueles tejer muy suelto, quizá prefieras metal. La ventaja del set es que, al cubrir varias medidas, puedes probar cómo responde tu hilo y tu tensión en cada grosor. Con la madera, muchas tejedoras encuentran un equilibrio práctico entre fluidez y control.

Para el set de agujas de doble punta DROPS Pro Romance, lo más importante es el almacenamiento: guarda cada medida junta y evita humedad o calor excesivo, igual que harías con cualquier herramienta de madera. Si te las llevas en bolsa, procura que no estén sueltas para que las puntas no se golpeen con otros accesorios. El estuche (cuando viene incluido) ayuda justo a eso: a separar grosores y proteger el conjunto.

En cuanto a limpieza, suele bastar con un paño seco o ligeramente humedecido si notas suciedad superficial, y secar bien después. Evita productos agresivos. Si tejes con fibras que sueltan tinte o con manos muy cremosas, una limpieza suave de vez en cuando mantiene el tacto uniforme y ayuda a que el hilo siga corriendo de manera constante.